13 ONG internacionales revelan detalles sobre la obstrucción de la ayuda que impide realizar sus operaciones humanitarias
En la última semana, la operación militar israelí en la Franja de Gaza se ha intensificado drásticamente, llevando al enclave a niveles de devastación aún más profundos. Los continuos bombardeos israelíes en el norte y centro de Gaza, incluidos los ataques contra escuelas gestionadas por la ONU utilizadas como refugios, así como las masacres de ayer en la denominada "zona segura" de Al Mawasi y Al Shati, han causado la muerte de más de 550 personas desde el 1 de julio.
Jerusalén/Madrid, 15 de julio de 2024 – El ejército israelí emitió nuevas «órdenes de evacuación» contra Jan Yunis y la ciudad de Gaza, desencadenando nuevos traslados forzosos masivos y comprimiendo aún más a los palestinos en zonas más pequeñas y superpobladas que carecen de recursos para mantener la vida humana. Como consecuencia, la catástrofe humanitaria sigue agravándose, mientras que los obstáculos para el suministro de ayuda siguen siendo terribles.
Estos últimos acontecimientos agravan la catástrofe humanitaria mientras las organizaciones de ayuda siguen enfrentándose a terribles obstáculos impuestos por la continuación de las operaciones militares israelíes sobre el terreno. En el informe Gaza humanitarian snapshot (Situación humanitaria en Gaza), publicado hoy 15 de julio, 13 ONG internacionales ofrecemos una imagen precisa de los inmensos desafíos que impiden nuestra respuesta humanitaria en Gaza.
Las ONG informan de que la entrada de ayuda en Gaza se ha deteriorado gravemente desde la gran incursión terrestre israelí en Rafah a principios de mayo. Es común que los pasos fronterizos del sur estén totalmente cerrados o no estén disponibles desde el punto de vista logístico debido al deterioro de las condiciones de seguridad. NRC, MSF, MdM y Mercy Corps denuncian de que sus envíos de ayuda a través del corredor egipcio se han paralizado desde la invasión israelí de Rafah. La apertura de los pasos fronterizos del norte sigue siendo incoherente e impredecible: mientras que canalizar mercancías desde Ammán al norte de Gaza no debería llevar más de seis horas, Oxfam tardó cinco semanas en introducir 1.600 paquetes de alimentos en el norte de Gaza.
Con ejemplos alarmantes, explican cómo el movimiento para llegar a las personas más vulnerables dentro de la franja de Gaza es inseguro y restringido: controles militares al personal humanitario vigilados mediante cámaras o drones en los puestos de control israelíes, obligación de notificar a las autoridades israelíes sus movimientos incluso dentro de las «zonas humanitarias» designadas, o personal obligado a utilizar carros tirados por burros debido a la falta de combustible.
La preocupación por la vida de nuestro personal sigue creciendo, ya que su seguridad ni siquiera puede garantizarse dentro de nuestras instalaciones humanitarias. El reciente asesinato de un miembro del personal de HI y la obligación de MdM y MSF de abandonar las instalaciones sanitarias debido a los ataques israelíes y a las llamadas «órdenes de evacuación» son ejemplos recientes de la ausencia de respeto por las responsabilidades de las partes en conflicto de garantizar la protección de las y los trabajadores humanitarios.
Tras nueve meses, es extremadamente urgente que los terceros Estados reconozcan su incumplimiento de sus obligaciones de garantizar el respeto del derecho humanitario internacional en Gaza, y consideren la posibilidad de ejercer una verdadera presión sobre las partes en conflicto para alcanzar un alto el fuego inmediato y duradero, única forma de proporcionar asistencia humanitaria y proteger y salvar vidas en Gaza.
Descarga aquí el informe Gaza humanitarian snapshot (Situación humanitaria en Gaza)
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